En los últimos años, el procesamiento de tarjetas ha experimentado un cambio notable. El creciente número de servicios financieros ofrecidos ha presionado a los jugadores tradicionales a buscar adquisiciones y consolidaciones para aprovechar las economías de escala, mientras que los nuevos competidores que ingresan al mercado con un enfoque fresco y plataformas tecnológicas han demostrado ser un factor disruptivo. En un corto período, los nuevos competidores lograron asegurar una gran base de clientes y altos volúmenes de transacciones.
La evidencia del mercado lleva a preguntas fundamentales: ¿Qué factores impulsan el éxito de estos llamados procesadores de tarjetas de próxima generación, que se posicionan como sistemas fáciles de integrar que a su vez simplifica el cumplimiento? ¿Está jugando la regulación un papel principal en ese éxito?
Desafiando la Hipótesis
La hipótesis inicial sugiere que el acceso a licencias bancarias y de pago permite a los procesadores de tarjetas ampliar su alcance y capturar nuevos segmentos de mercado. Para probar esta hipótesis, BPC y Arkwright realizaron un análisis, cuyos resultados completos se muestran en la guía 'Next Generation Processing'.
Se realizó un análisis exhaustivo de 46 procesadores de pagos para evaluar si poseen licencias relevantes como licencias de Institución de Dinero Electrónico (EMI), licencias de Institución de Pago (PI) o licencias bancarias completas. El objetivo era determinar si las licencias permiten a los procesadores expandir su mercado de manera efectiva.
La investigación reveló que tanto los jugadores tradicionales como los nuevos competidores aprovechan modelos de licencias similares, obtenidos por ellos mismos o a través de asociaciones, lo que indica que las licencias por sí solas pueden no proporcionar una ventaja competitiva.
Aunque la cobertura regulatoria por sí sola no resultó ser un factor crítico para que los procesadores de próxima generación prosperen, sigue siendo esencial ofrecer estos servicios (ya sea directamente o a través de socios) para apoyar a los propietarios de programas de tarjetas en el contexto de finanzas integradas o emisión de marca blanca. Se pueden considerar dos tipos de licencias:
- Licencias Regulatorias: Otorgan autorización legal para emitir tarjetas de pago dentro de una jurisdicción específica. Dependiendo de la estructura de la asociación y el tipo de producto, las áreas claves de cumplimiento pueden incluir puntuación crediticia, informes regulatorios, GDPR (protección de datos), AML (prevención de lavado de dinero), KYC (conozca a su cliente) y requisitos de capital.
- Licencias de Esquema: Permiten la emisión de tarjetas de pago y el procesamiento de transacciones dentro del marco, la red y la marca de un esquema de pago (por ejemplo, Visa, Mastercard).
Los desafíos han estado creciendo más rápido que el mercado en general en los últimos años. Sin embargo, el éxito no puede atribuirse únicamente a uno de los factores previamente descritos, como las API abiertas (que cubrimos en un blog anterior) o el soporte regulatorio integral. Según el informe, proviene de cómo todos estos elementos trabajan juntos y de qué tan bien el nuevo competidor puede combinarlos para enfocarse en las necesidades específicas del cliente o en diferentes partes del proceso de emisión de tarjetas.
Descubra otros factores críticos y las características más relevantes, que se evaluaron para obtener como ventajas competitivas y pueden influir en el éxito de los nuevos competidores.
Si desea saber más sobre el procesamiento de tarjetas de próxima generación, descargue el libro blanco completo.